martes, 25 de septiembre de 2012

Ortografía y desidia


   Este sábado, 22 de septiembre, llegó con salvajes urgencias domésticas. Demasiado trabajo acumulado. Demasiados problemas que resolver. Era, en resumen, uno de esos días en que el lector profesional de prensa se siente con el absurdo derecho a ojear periódicos. Qué tontería. Como si los periódicos estuvieran dispuestos a dejarse despachar en apenas cinco o diez minutos... 


   Comencé, como suelo hacer los sábados (capricho estúpido), con lavanguardia.com. Y vi la palabra "Telemadrid" en portada. Siempre que leo "Telemadrid" pienso: "por qué". Un capricho menos estúpido que el anterior. Quizá por eso no me extrañó tropezar con ese vandálico "por qué", así escrito, en las tres líneas de texto que acompañaban al titular. Todo cambió cuando dejé mis pensamientos y evocaciones personales para intentar comprender los porqués del periodista. A punto estuve de añadir un comentario a los 523 que adjuntaba la noticia. Pero tenía prisa. Mucha prisa. Solo quería echar un vistazo a la prensa seria.



   Un minuto después, en elpais.com, tropiezo con el neologismo o la errata "vree". Un descuido sin importancia, claro está. Veinte segundos más tarde, en la misma página, "Tres [con mayúscula inicial después de una coma] generales" llaman mi atención. Una minucia, por supuesto.


   Dejo El País y miro en otros medios. En publico.es Aznar se hace un lío con las comillas. Así que no sé si "confuso" se predica del "Estado" o del propio "Aznar". Podría aquí aventurar una hipótesis, pero lo siento: no tengo tiempo para bobadas lingüísticas. Reviso también las cuatro noticias más destacadas -tengo prisa, tengo prisa...- en abc.es: descubro entonces que Sergio Ramos tiene más aficiones "a parte" del fútbol. He escrito aquí mismo (perdón por la autocita) que el deportivo es el más sintomático de todos los periodismos. 

Faltan acentos o sobran versos. Lo segundo no es descartable, porque -según as.com- un jugador de fútbol puede entrenar "en solitario" junto al Real Madrid Castilla o el Real Madrid C. Asombroso, poético. Ya sé qué se pretendía decir, pero ¿no lo podrían haber dicho mejor? ¿Cuando en marca.com leo "Dinsey" debo entender "Disney"? ¿Cuando escriben "quienes" debo imaginar "quiénes"? Mourinho (como sugiere elconfidencial.com) tal vez confunda "mientras que" y "mientras", pero alguien que trabaja amasando titulares no debería dudar en cosas tan elementales.
   
   Por si no ha quedado claro: todo cuanto he referido e ilustrado hasta aquí procede del material periodístico incautado en menos de diez minutos de lectura apresurada. Se han examinado, al azar, seis o siete páginas web de naturaleza periodística. Se han ojeado los titulares y esas dos o tres líneas de texto que han heredado las tareas de las viejas entradillas. Treinta o cuarenta palabras por pieza, como mucho. Con frecuencia incluso menos.
   Alguien (si es que queda alguien a esta altura del texto) podría pensar que lo grave es el más que notorio desastre de la ortografía. No lo veo así. Lo peor, a mi juicio, es la desidia, la dejadez, la falta de interés que revela esta escritura desmadejada, sin nervio, indolente.











2 comentarios:

  1. A mí también me sangran los ojos cuando veo errores así, porque sé que no todos son simples erratas, como el "vreen" en vez de "creen". A veces pulso en el "rectificar" que incluye la noticia para advertirles, pero últimamente paso. Por un lado no entiendo cómo los autores de esas noticias han podido cometer semejantes errores y por otro no entiendo cómo no hay nadie que revisa los textos...

    ResponderEliminar
  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar